Situación Actual 

       

    Los motivos que llevaron a la realización de este proyecto nace de lo que a simple vista parecía un asombro al ver como jóvenes y niños saltaban hacia las turbias y profundas aguas del río Caroní desde el primer puente construido en Ciudad Guayana mientras cruzaba en autobús, acto que me llamó la suficiente atención e inspiración para escribir mi primer guión largometraje de ficción titulado “El Salto de Los Ángeles”, teniendo nociones básicas sobre la escritura de guión y asumiendo que eran parte de la comunidad de Campo Rojo comencé a escribir. Después de una primera versión del guion de 90 páginas escritas se genera el hecho de querer hacer una película desde el interior del país en donde mi motivación, el anhelo y la autogestión han sido mi primer recurso.

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   Llevar a cabo la realización de un proyecto cinematográfico en Venezuela desde el interior del país en una comunidad con características de abandono sociocultural sin presupuesto, generan un conjunto de obstáculos, además de considerar el centralismo de la institución cinematográfica y la burocracia institucional con la que nos enfrentamos a la hora de pasar por los procesos del cumplimiento de requisitos que se exigen a través la ley de cine y su reglamento, las nulas alternativas de formación de cine permanente que nos ofrece el estado Bolívar, añadiendo la crisis económica de nuestro país que afecta el aumento constante de la inflación que desestabiliza los costos de cualquier presupuesto de una producción cinematográfica, la escases de alimentos, la inseguridad y la hostilidad política que en síntesis generales crea una situación inestable. 

   

    Además de tomar en cuenta que en el transcurso del tiempo esta comunidad es vista hoy en día por muchos guayaneses y reseñados por algunos medios de comunicación regional como un sinónimo de violencia, miedo, inseguridad, peligro, muerte, advertencia y discriminación, aspectos que denotan una pérdida de valores en la comunidad.

    

   El abandono socio-cultural a través del tiempo por instituciones competentes, que tienen el deber de darle el valor que se merece esta comunidad en sus 73 años de fundada, a pesar de ser una comunidad pionera en Ciudad Guayana ha generado una serie de carencias y molestias que se ven reflejadas en el presente como en el descuido de su infraestructura patrimonial, la desidia en la atención cultural, escasez de actividades recreativas y artísticas permanentes, la falta de identidad y sentido de pertenencia por ignorar el contenido histórico de su comunidad y el valor socio-cultural que merece, ocasionando la pérdida de valores en el núcleo familiar, entre otros problemas que han descuidado su progreso.