Antiguamente la comunidad de Campo Rojo era un puerto de chalanas que conectaba a Ciudad Bolívar y Puerto Ordaz con San Félix, el crecimiento industrial de la región dio origen a la construcción del primer puente sobre el río Caroní en Ciudad Guayana atravesando la comunidad de Campo Rojo; el cual ocasiono su división territorial con la comunidad Sabana de Piedra que está ubicada hacia el otro extremo de las bases del puente, sin embargo logró unir a Puerto Ordaz y San Félix en un solo municipio. 

   

     Actualmente de esta comunidad son los niños, jóvenes y adultos que saltan hacia el río en caída libre desde el puente Caroní en un acto que parece ser hoy en día una tradición en la que exponen sus vidas ingenuamente por diversión.

 

    Geográficamente la comunidad de Campo Rojo se encuentra al frente de unas instalaciones privadas conocidas como: “El Club Náutico Caroní” en donde se desarrollan actividades sociales, culturales, deportivas y acuáticas. Los habitantes de la comunidad desarrollan la pesca artesanal, labores en pequeños comercios familiares, actividades deportivas y actividades tradicionales durante las fechas de Semana Santa como: la Quema de Judas, el palo ensebado, baile de trompo, carrera de sacos, carrera de huevo en cuchara y el vuelo de papagayos, también tiene una escuela primaria y un módulo de salud. Además posee en su población herederos de las primeras familias fundadoras de Ciudad Guayana con una amplia diversidad cultural y rasgos de guayaneses originarios.

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    La comunidad de Campo Rojo asimismo guarda en silencio su primer nombre de Puerto Gómez, lugar que aún conserva sus cimientos olvidados debajo del agua, por donde entraron algunos de los primeros pobladores de Ciudad Guayana a fin de desarrollar una gran ciudad minera. Es notable que a pesar del tiempo lo que solía ser una pequeña ciudad pintoresca como la cuentan algunos de sus referentes, Puerto Gómez sigue teniendo estratégicamente el potencial que la favorece al desarrollo de una comunidad para la actividad pesquera, portuaria e inclusive turística, dada su condición geográfica e histórica; con algunas muestras de los patrimonios arquitectónicos de una Guayana naciente.

   

    A pesar de contar con el valioso y arduo trabajo de los líderes vecinales, la artista y psicólogo y actualmente patrimonio cultural viviente de Ciudad Guayana “Ana Rosa Angarita”, uno de los cronistas de la ciudad “Homero Hernández” oriundo de la comunidad, otros ciudadanos del Municipio Caroní, fundaciones e instituciones que han realizado una labor cultural y social importante; no han conseguido los suficientes beneficios y atenciones gubernamentales que quizás esta se merece por su contexto histórico.